MAESTRO KATSUMI MAMINE IN MEMORIAM: TOKIO 31 DE MARZO DE 1944 – BARCELONA 14 ABRIL 2020

TRES AÑOS NO SON NADA PARA RECORDAR CADA DÍA A UN GRAN MAESTRO

No pasa ni un solo día que no recuerde al Maestro Katsumi Mamine.

Por mi trabajo estoy todo el tiempo con él, de una manera u otra.

Y estos días que se cumplen 3 años de su fallecimiento, es bonito escribir sobre su figura. En esta ocasión no se trata de realizar un escrito hablando de cuáles fueron sus numerosas aportaciones. Para ello te recomiendo otros artículos de este blog, como es Katsumi Mamine y el Seitai, que te invito a leer, darte una vuelta por Youtube y por supuesto, disfrutar de los libros Seitai, en especial de Seitai Inteligencia Vital, que está dedicado por completo a él y a su trabajo.

Hoy quiero divagar.

Y en ese divagar no sé qué saldrá. Pero sin duda será algo más personal. También quiero aprovechar para dejarte pequeñas pildoritas en las que Katsumi habla. Son extractos inéditos que he ido compartiendo cada año recordando su muerte, sacados de una entrevista muy especial que le hice y que aún está por publicar.

El fallecimiento de Katsumi Mamine, fue una gran pérdida personal y humana. Su legado, fraguado a fuego lento junto a la otra Maestra de Seitai, Francisca Garrido, es una maravilla que hay que custodiar e intentar transmitir como ellos merecen.

Katsumi Mamine hizo el mejor trabajo que se ha realizado sobre Seitai, después de morir Haruchika Noguchi, Tokio 1911-1976.

Ni en Japón, la cuna de esta Cultura de Vida y Salud, ni tan siquiera en la Sociedad Seitai con sede en Tokio, se ha realizado algo semejante. Porque Katsumi tuvo claro que el Seitai requería una formulación seria, basada en una investigación rigurosa de la ciencia.

¿Y por qué tanto trabajo?

El Maestro Mamine sabía que el Seitai no es algo que le gusta a unos y a otros, como sucede con cualquier actividad. Está claro que no todo el mundo va a dedicarse a la música, al yoga, al pilates, a la sanidad, o la enseñanza. Sin embargo, todo ser humano dispone de un organismo a través del cual expresa su vida. Una vida única e irrepetible que habita en movimiento. Y ese movimiento posee una inteligencia y un rigor que está implicando a todo lo que vivimos y sentimos. Por supuesto involucra a nuestra salud, (o falta de ella), y a nuestra fuerza vital.

Seitai es un descubrimiento universal, tan importante como el fuego o la electricidad. Y sé que lo que digo es grande. Pero después de 20 años de vivencia, de estudio profundo y de trabajo divulgativo en el Seitai, sé que lo que digo es así.

El Maestro Mamine falleció hace tres años y su carisma sigue intacto. Hoy quiero reflexionar sobre lo que Katsumi significó en mi vida y cómo ha sido la persona más importante para que mi deseo y curiosidad creciera de tal manera que, lo privado diera paso a lo público.

Gracias a Katsumi, hoy en día me dedico a divulgar esta maravilla.  

Nota: Todo lo que ves en verde en este escrito, te lleva a otros contenido. Y recuerda que, además, al final del todo, encuentras este mismo blog leído por su autora, para que si no tienes tiempo de leer, lo escuches en cualquier lugar, mientras haces tus cosas 🙂

MAESTRO KATSUMI MAMINE PROTAGONISTA ABSOLUTO DE “MI TESORO”.

Tengo un pequeño maletín al que llamo “mi tesoro”, y que dejo bajo la custodia de una persona muy querida, cada vez que viajo y no pudo llevarlo conmigo.

Dentro de ese maletín conviven unos 15 discos duros en los que he recabado una colección documental valiosísima sobre Seitai.

Durante más de 20 años, he ido organizando ese material con mimo y es la base de mi trabajo, que pretende ser un legado para el futuro.

Para que así sea, todo debe quedar ordenado y preparado para ser usado como base documental inestimable. Sólo salgo de ese trabajo para realizar algún curso, escribir un blog como este o publicar en redes.

Digamos que estas cosas, son añadidos a lo que realmente estoy haciendo.

En mi tesoro, puedes encontrar cualquier cosa.

Es como esas tiendas de antigüedades, en las que te pierdes durante días y siempre sale algo nuevo.

Lo mismo encuentras las clases magistrales de Seitai con el tristemente fallecido Okayima Sensei; como un audio del Fundador de la Cultura Seitai, Haruchika Noguchi hablando durante 1 hora ante miles de personas; como cartas de Mamine; fotos que aún no han visto la luz; las revistas Zensei, tanto originales como organizadas por temas; al igual que presentaciones de mis libros sola, o con la inestimable compañía de Katsumi y Francisca; y viajes. Muchos viajes recorriendo varios países del mundo, por los que he ido divulgando el Seitai.

Realmente es una auténtica colección-tesoro que era necesario recabar.

Sólo el tiempo, puede crear algo semejante. Y cómo no, entre esos discos duros están reflejados años y años de aprendizaje junto al Maestro Mamine que me permitió grabar en vídeo.

Hay mucho.

Pero lo más importante son sus clases de Soho. Ese Seitai “profesional” para el que él abría sus puertas sólo a personas que realmente llevaban años de práctica y de entrega a esta Cultura.

Su Dojo era la Universidad Seitai.

Y el contenido de esas clases no están reflejadas en ningún lado, ni siquiera en sus libros.

Pero no sólo eso.

Todas esas grabaciones, horas y horas, están transformadas en transcripciones adaptadas a la lectura. 

Fueron años de trabajo solitario, para que aquellas jornadas no cayeran a un vacío efímero.

Todo este trabajo que he realizado, nunca fue hecho al tuntún. Empezó mucho antes de conocer a Katsumi.

Desde el primer momento supe que había que hacerlo y hacerlo bien. Con proyección de futuro para que todas las generaciones venideras, puedan disfrutarlo. En ello estoy…

¿Pero sabes cuál es el contenido de todos esos discos duros, del que estoy más orgullosa?

De la entrevista que realicé a Katsumi Mamine, antes de su muerte.

Sé que puede parecerte algo normal, teniendo en cuenta que yo soy periodista y él confiaba en mi forma de hacer.

Pero no tiene nada de normal.

Que el Maestro Mamine se plantara ante una cámara durante 8 horas seguidas, te aseguro que es algo extraordinario. Pero lo es más cómo se presentó a esa entrevista. Ese día Katsumi estaba feliz y entregado. Se muestra totalmente confiado y volcado. Relajado y divertido.

Aquel día hablamos de su infancia, de sus primeros recuerdos en el Dojo de Noguchi. De su familia. ¿Sabías que Katsumi tenía 20 tías y tíos, sólo por parte de madre? ¡Imagínate la de primos que lo rodeaban! Y aún así, fue un niño solitario y tímido.

Por supuesto hablamos mucho de su trabajo que desmenuzamos con gusto, saboreando cada palabra.  

ES UN TESORO dentro de mi tesoro.

Algo que queda y quedará para siempre, porque desgraciadamente, no habrá más oportunidades de entrevistarlo de nuevo.

Y a esto no me acostumbro…

Siempre tengo la sensación de que en cualquier momento sonará el teléfono y en la pantalla aparecerá el nombre de KATSUMI MAMINE.

Pero eso, no volverá a suceder.

KATSUMI MAMINE EL MAESTRO QUE FUE APOYADO POR OTRA GRAN MAESTRA: FRANCISCA GARRIDO

Mi llegada al Dojo fue algo muy especial. La recuerdo muy emocionante y todo está descrito en el libro Seitai Inteligencia Vital.

Enseguida hubo una corriente de simpatía y aprecio.

Pero no sólo sentí aprecio de Katsumi. Me sentí acogida por Francisca Garrido, la gran Maestra de Seitai, compañera inseparable de Katsumi en este intenso trabajo Seitai que realizaron.

Sin el soporte de Francisca, bien seguro que el trabajo de Katsumi no hubiera podido progresar.

Un estudio tan profundo como el que él realizó, requiere de un tejido conjuntivo que se ocupe de los asuntos mundanos y no tan mundanos.

Y ella lo hizo magistralmente.

El conocimiento de Francisca de Seitai es inmenso, porque además ella tiene una formación universitaria científica.

Sin duda siempre fue el complemento perfecto para que toda esta formulación grandiosa que ha realizado el Maestro Katsumi Mamine, llegara a buen puerto.

Y yo me siento en la actualidad muy feliz de ser amiga suya. Además de agradecida por dedicar el bello prólogo que escribió, de su puño y letra, para el libro Seitai Mujer Vital, al que accedes pinchando el enlace.

En general, tanto mi pareja como yo, fuimos muy bien recibidos en el Dojo de República Argentina, no solo por ellos, sino por todo el mundo.

Creo que enseguida Katsumi se dio cuenta de que todas mis horas vividas y dormidas, estaban orientadas al Seitai y a realizar un trabajo diferente al que hasta entonces se había hecho.

Y para nada todo esto fue fruto de la programación.

Sino que como todo lo hermoso de la vida… SURGIÓ…

Alguna vez me dijo que yo era una locomotora… A lo que Francisca contestaba que no, que mejor un tanque. (De esto último me he enterado recientemente :))

Ahora me río. Pero esa ha sido siempre mi guía. Cada escueto, “siga” ha sido un impulso que aún se mantiene activo.

Si él no me hubiera dado esa confianza, creo que hoy en día no me hubiera dedicado a algo tan complejo como es la divulgación Seitai.

Un gran árbol tuvo que madurar antes en el vientre de la tierra.

Un trabajo con una base sólida, como cualquier cosa valiosa, surge del silencio, de la oscuridad y del tiempo.

Y el Maestro Mamine pasó encerrado en un pequeño despacho de su Dojo de República Argentina, medio siglo.

Sólo salía para poner sus rodillas en la moqueta verde donde nos sentábamos sus alumnos a escucharle y a poner en práctica viva, sus hallazgos.

DIVULGACIÓN SEITAI

El Maestro Katsumi Mamine merece que su extraordinario trabajo llegue lo más lejos posible a la mayor parte de personas que habitan este mundo.

Una labor que realizó de una manera sublime y que además, hay que destacar, que lo compartía con gran generosidad. Porque no hay mayor generosidad que lo que hizo cuando me acompañó a la presentación en Barcelona de mi libro Seitai Inteligencia Vital.

No es fácil. Nada fácil.

Algo así, sólo puede hacerlo alguien muy grande.

El Maestro Mamine amaba de verdad la idea de que el Seitai llegará a cualquier punto del planeta.

Era un Maestro que en lo referido a su trabajo, carecía de EGO. Pero con la conciencia clara de que su trabajo era riguroso, extraordinario y que podía exponerlo ante cualquiera con total seguridad.

Siempre admiré su labor y su forma meticulosa de hacer.

Ten por seguro, que si Katsumi no me hubiera animado, ahora estaría escribiendo novela, que es para lo que había preparado mi vida desde que tenía 12 años.

Desde niña, tuve la habilidad de adelantarme a lo que iba a vivir, preparando el terreno. Una intuición que me ha dado muchas cosas buenas en esta vida.

Tenía clarísimo, (y no me pregunté el porqué de esa seguridad), que me iba a dedicar a algo que no podía estar vinculado, ni a la ambición, ni a los logros económicos. Sentía que me esperaba algo que me movería desde dentro. Algo que surgiría del gusto de hacer por hacer.

Y para adquirir esa libertad, trabajé de una manera orientada.

Libertad para mí era poder vivir despreocupada de cómo se pagan los recibos. Si la pasión se transformaba en otra cosa, dejaría de ser pasión, para convertirse en mercadeo.

Pero mira por dónde, la vida no me estaba conduciendo hacia el relato, sino al Seitai.

De todo el impulso que el Maestro Mamine me dio, hay un detalle esencial que me marcó. Quizá el más insignificante de todos los que me mostró.

Pero fue lo que más entró en mí.

Cada vez que iniciaba la redacción de uno de mis libros, yo dudaba. Entonces se lo mandaba para que lo revisara. Algo que no hacía habitualmente con nadie, porque siempre estaba trabajando y vivía con la premura de terminar lo iniciado, antes de que la muerte lo detuviera.

Entonces sucedía.

No pasaba mucho tiempo cuando recibía una llamada. Y al otro lado, estaba siempre su respiración emocionada. A lo que sucedía un simple: Siga… Y yo siempre seguía. Así de sencillo.

¿Por qué?

Pues porque Katsumi, una persona rigurosa y celosa de su trabajo, me decía un escueto siga…

Siga parece poco. Pero Katsumi con estos siga, no se estaba dirigiendo a mi intelecto, sino a mi vida espontánea.

Y esto, el Maestro Mamine, lo hacía muy bien.

MAESTRO KATSUMI MAMINE: ARTÍFICE DEL CAMBIO DE RUMBO DE MI VIDA

Hay personas que nacen en lugares diferentes, en épocas diferentes, y con intereses diferentes. Digamos que son personas avocadas a no encontrarse nunca.

Pero hay pasiones que las llevan a toparse.

Supe de la existencia de Katsumi a los pocos meses de empezar a practicar Katsugen Undo.

Soy de Madrid y vivo en un pequeño pueblito de Cuenca donde tengo mi Dojo. Katsumi vivía en Barcelona.

Realmente para mí la distancia geográfica no era el impedimento. Lo era la conciencia clara de que antes de adentrarme en el Conocimiento Seitai, debía entregarme a las prácticas.

Porque en Seitai, si no hay una vivencia de años, es muy difícil asimilar un conocimiento, que antes que intelectual, es orgánico. Y por supuesto, mucho menos, transmitirlo. Algo que nunca fue mi intención, sea dicho de paso.

Jamás me imaginé divulgar esta Cultura increíble. Pero una vez inserta en ello, cada vez me doy más cuenta de la dificultad que entraña.

En cualquier comunicación debe haber un actor y un receptor que hablen el mismo idioma.

Pero el Seitai tiene un lenguaje nuevo. Un ADN, unas huellas digitales propias. Y lo complicado es que ese lenguaje no se aprecia tan innovador a simple vista. Al fin y al cabo, habla de la vida. Y el Ser Humano ha tomado como referencia la observación de la vida, para desarrollar sus conocimientos y cimientos sociales.

Esto que se parece, pero que no es igual… complica mucho la transmisión. Porque te plantas ante gente muy formada, que sabe mucho y que todo lo pasa por el tamiz del conocimiento que han adquirido durante años. ¡Es tan complicado desmontar lo que alguien ha edificado en su mente!

Decía Einstein que es más difícil desintegrar una idea que un átomo. Y es así. Hay conceptos que damos por buenos con la misma certeza que tenemos, de que a cierta hora del día, el sol se irá y vendrá la noche.

En Seitai hay un matiz importante, que lo diferencia de la manera habitual que hemos determinado que es la forma de adquirir un aprendizaje. Es una manera más ancestral, tal y como hacían nuestros antepasados.

En nuestra cultura, nos hemos acostumbrado a estudiar e intelectualizar, antes de poner en práctica lo aprendido. Sin embargo, en la Cultura Seitai, la vivencia va por delante de la interpretación de los datos.

Sólo cuando se ha vivido y experimentado orgánicamente, los datos toman su forma.

Y despertar ese chip de que la vivencia es la clave y que prioriza el posterior conocimiento, es algo que a día de hoy es difícil de digerir.

No hay tiempo. Porque todo lo que hacemos debe ser por y para algo. Pragmatismo puro y duro.

Pero considero que no hay nada menos pragmático que este tipo de pragmatismo. Porque estamos hablando de VIDA. De comprensión de la misma. De convivir con esa vida. De anagnórisis, la venda que cae de los ojos. De sencillez.

Y al mismo tiempo de entrega y tiempo. Mucho tiempo… Disfrutando el viaje. Sin objetivos. Sin resultados. De conectar con todo lo que surge y se hace por sí mismo. Sin doma ni dominio de nuestra ignorada, (pero no ignorante) naturaleza.

De respeto.

Conozco gente que conoce el Seitai tangencialmente. Te hablo de venir a un curso de un fin de semana. Y ni cortos ni perezosos, lo meten en su colección de propuestas profesionales. Algo que me deja alucinada.

La ignorancia es la madre del atrevimiento.

El Seitai no son “ejercicios”, ni método, ni técnica. Lo habitual es no pase nada y se cansen. Y mejor que no pase, porque si pasa, no tendrán el bagaje suficiente para manejar las situaciones que pueden surgir.

Como decía el Maestro Mamine: Que cada uno haga lo que pueda…

Las personas tan arriesgadas y con tanta falta de ética, pueden llegar a hacer algunas cosas en esta sociedad que vivimos tan superficial. Pero en el Seitai... No.

En este sentido, estoy tranquila.

LOS SECRETOS DE LA TRANSMISIÓN SEITAI

Orientar en Seitai requiere finura. Una finura que no se te note. Una finura ausente de ego y motivada por la entrega, sin más.

Acompañar a que las personas realicen un viaje que va desde lo vestido a lo espontáneo, es algo bonito, muy bonito, pero que requiere un proceso previo de vivencia de quien se embarca en tal misión. Al menos hasta que el Ser Humano deje de estropear su naturaleza espontánea. Lo que significa admirar lo que nos habita y respetarlo. No temerlo y ante el temor, domesticarlo.

Sólo cuando los adultos aprendan a comprender la manifestación espontánea de las niñas y niños que llegan a este mundo, nuestra labor desde el Seitai, se dará por concluida.

Porque no se trata de aportar nada nuevo. Sino de desaprender.

No se trata de crear estructuras. Sino de romperlas.

No se trata de inventar. Sino de rigor natural.

Es complicado transmitir Seitai y sus prácticas. Porque te manejas en lo intangible. En lo que no se ve, pero existe. Y ahí, las palabras, no tienen nada que decir.

Intuición. Y más intuición.

En Seitai, eso de hablando de entiende la gente, no tiene ningún sentido. Porque la que realmente habla y comunica, es la respiración, la intuición y el sentir profundo.

Hace poco que me he dado cuenta de que en mis clases, actúo como una prestidigitadora. Uso mucho el humor y la gente mira para un lado, se relaja, y es entonces cuando pasa lo que tiene que pasar. Y ese tiene que pasar, va más allá de las palabras y de todos los datos.

No sirve de nada si no conduces de manera intangible, a la vivencia. Y cada curso supone para mí un aprendizaje.

Realmente enseño para aprender. Porque es muy difícil y cada curso es un reto para mejorar.

Es por esto, por lo que ni de lejos me hubiera imaginado llegar a dar clase a miles de personas, como ha sucedido, y haber llegado a muchas, muchas más, a través de mis libros y de la Escuela Seitai.

Y menos que me motivara a ello alguien tan pulcro con su trabajo como lo fue el Maestro Mamine.

Pero así fue…

GRACIAS MAESTRO KATSUMI MAMINE POR SU APOYO

Katsumi escribió el prólogo de mi primer libro, Seitai Inteligencia Vital, después de una larga colaboración con él, en la redacción de su libro El Movimiento Vital.

Hubo gente muy cercana que lo conocía muy bien, que se quedó sorprendida de lo que había escrito. Yo entonces no era consciente de ello. Pero visto con la perspectiva del tiempo, entiendo a qué se referían.

Ahora comprendo lo que entonces no alcanzaba a comprender.

Aquí lo tienes, por si quieres echarle un vistazo.

ACCESO AL PRÓLOGO DE KATSUMI MAMINE EN EL LIBRO SEITAI INTELIGENCIA VITAL.

MAESTRO KATSUMI MAMINE: UNA VIDA DE ENTREGA PARA QUE LA HUMANIDAD RECIBA EL SEITAI

El gran guitarrista Narciso Yepes, (Lorca 1927 – Murcia 1997), descubrió el Katsugen Undo siendo muy mayor y estando ya enfermo, de mano del fundador de esta Cultura, Haruchika Noguchi.

Antes de morir se refirió al Seitai de esta manera:

Estoy convencido de que el Seitai, legado por el Maestro Noguchi, es la más innovadora y significativa cultura espiritual que ha recibido la Humanidad en este siglo.

Él se refería al S. XX. Pero en el XXI, lo es aún más.

El Maestro Mamine no pensó dedicarse al Seitai, tal y como puedes escucharle en este vídeo. ¡Pero menos mal que lo hizo!

Y cuando lo decidió, no cejó ni un solo instante.

Los ingredientes de su trabajo fueron:

Tesón.

Pasión.

Pulcritud.

RIGOR.

Sin estas cualidades, dudo mucho de que alguien hubiera podido llevar a cabo el extraordinario trabajo que realizó durante 50 años.

Su impulso fue de tal naturaleza, que nunca paró, porque…

Mamine nació Seitai.

Mamine vivió Seitai.

Y Mamine murió a la manera de la Cultura Seitai. De un día para otro. Sin hacer ruido. Viviendo intensamente hasta el último aliento. Viviendo con una pasión entretejiéndole las venas. Existiendo con un deseo adherido al vientre. Fiel a un propósito inquebrantable.

Mamine fue un hombre culto versado en ciencias, artes, letras, filosofía, tradiciones de su país Japón y heredadas de su lugar de acogida, Barcelona.

Mamine fue un hombre inteligente y sensible, buscó y rebuscó internamente, desde su infancia.

Sentido. ¿Tiene sentido?

Creo que sin saberlo, ya de joven, esta incógnita en forma de X en la fórmula de su existencia, estaba muy presente. Quizá es por eso, por lo que todos sus éxitos los convertía en fracasos. Ningún éxito podía sobrevivir a su reiterada y eterna pregunta de: Y esto… ¿Qué tiene que ver con mi vida real?

Vida real para Katsumi, era hablar de la vida que le respiraba. De la vida que le movía las células. Del deseo profundo que nacía de no se sabe dónde, pero que le hacía sentir que era un Yo con el que realmente se podía identificar.

Sentido. Sentido. ¿Tiene sentido?

KATSUMI MAMINE VIVIÓ SEITAI DESDE ANTES DE NACER

El Maestro Mamine conoció el Seitai mientras flotaba en el vientre de su madre. Pero jamás pensó dedicarse a ello. Digamos que la responsable de su dedicación, fue su duda existencial con cada actividad que iniciaba.

Era una duda en forma de goteo.

Cuando se implicaba en algo y finalmente lo conseguía, le surgía de nuevo eso de… ¿Y esto qué tiene que ver conmigo en realidad?

Sentido. Sentido. ¿Tiene sentido?

Creo que es una gran pregunta para hacernos todos.

¿Realmente lo que vivimos cada día tiene algo que ver con lo que deseamos realmente?

Esta pregunta de Mamine, que lo convertía en un suflé caído con cada logro, es puro Seitai.

¿Qué tiene que ver lo que me rodea con lo que me vive dentro?

¿Qué es eso que me mueve o me bloquea?

Y cuando hablo de pregunta, hablo de pregunta surgida del Organismo. No de la cabeza. Hablo de la globalidad que convive en nuestro Ser… En eso que SOMOS con mayúsculas.

Tan reiterado fue ese sentimiento envuelto en un interrogante… Tan pertinaz, seco y desnudo que, sin programarlo, la vida poco a poco lo fue reorientando hacia el principio del principio de sus orígenes, que no era otro que el Seitai.

14 DE ABRIL DEL 2020. FECHA DEL FALLECIMIENTO DEL MAESTRO KATSUMI MAMINE

Este artículo surge estos días en los que conmemoramos el tercer año del fallecimiento del Maestro.

Algo que de una manera u otra, he hecho cada año. Y sin comprometerme, porque no me gustan las promesas que quizá nunca pueda cumplir, tengo la sensación de que lo seguiré haciendo hasta el día en el que yo también tenga marchar.

Te he hablado de una entrevista muy especial que le realicé antes de fallecer. Su contenido íntegro verá la luz en el contexto adecuado. Porque esta entrevista merece ser mimada y tratada como merece.

Pero me gusta ir compartiendo contigo algunos extractos.

En los años anteriores, ya he ido dejando pequeñas pildoritas.

Y para la conmemoración de este año, 2023, he extraído una nueva pildorita.

Espero que lo disfrutes. Y que si se te ocurre algo que ayude a darle un impulso a todo esto, no dudes en contactar conmigo.

Es esencial que personas que descubrís esta maravilla y podéis aportar algo, lo hagáis.

No lo veremos.

Creo que pasarán muchos años antes de que esto forme parte de nuestra experiencia vital.

Pero el que no lo veamos, no significa que no trabajemos en plantar.

Si disfrutamos del mundo porque ya existía antes de nuestro nacimiento…

¿Qué hacemos nosotros a su vez para que los que están por llegar se encuentren con algo valioso paras sus vidas?

Creo mucho en que el Seitai es una perspectiva necesaria para aprender a vivir.

Algo que tuvo claro Haruchika Noguchi.

Algo que tuvo claro Katsumi Mamine.

Algo que es de todas y de todos.

Porque estar vivo es un milagro. Y ese milagro es nuestra vida cotidiana.

Entre tú y yo… HACEMOS SEITAI.

Continuamos…

calmar la mente calmar la mente

LAURA LÓPEZ COTO

Directora de la Escuela Seitai.

Escritora y Divulgadora especializada en Cultura Seitai, registrada en el Mº de Educación y Ciencia de Japón desde 1958.

SABER MÁS SOBRE LAURA LÓPEZ COTO EN ESTE VÍDEO

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